LA FE

       Las creencias son necesarias, es cierto que no podemos dar un paso sin creer ciegamente que esto se podrá realizar; así de simple. Tenemos que creer en la persona que está junto a nosotros, sólo así podremos entablar un diálogo con él. Es fe el amar y sentirse amado, es fe esperar que la persona que amas te dirija un sonrisa, fe es también la mera idea de que llegarás vivo al trabajo, fe en el futuro, en la ciencia, en el trabajo, en la amistad, en la verdad.

       Pero es duro tener fe en creencias que se fundamentan en el mal y la culpa,en aquellas religiones que parten de la idea de que eres un miserable, que sólo has de esperar el perdón por el simple hecho de nacer. Doctrinas que anunciando la humildad, tienen la soberbia de mostrarse como mejores que los no creyentes, religiones que llaman "vida de perfección" a una vida con los ojos apartados de este mundo.

       Y me resisto a comulgar con carnes y sangres ajenas, me niego a decir al que sufre: "es un privilegio sufrir, ofrécelo por amor"

.-"no, yo prefiero abrazarte y partirme el alma por encontrar una solución a tu dolor. Prefiero llorar contigo y tomarte de la mano, porque sabemos que este mundo es injusto..."

-. "No quiero designios inescrutables, ni voluntades misteriosas, ni amores de padre cruel que mira impasible el dolor de sus hijos, "

-. "Sigo siendo un hombre de fe, más que nadie, más limpia que la de los ascetas, más sencilla que la de los cenobitas medievales, o la de aquellos absurdos dendritas, que vivían consagrados a Dios en las copas de los árboles. Creo en mis pies y en mis ojos, en tus palabras y en el sabor de tu boca, en el roce de tus manos, en el viento frío del norte, en las tardes de verano junto al mar, creo en ti, amor mio"